El sol se encontraba ya en su cenit y
transmitía un calor casi insoportable mezclado con la humedad del ambiente. Era
insufrible para mí, y no me dejaba pensar en claro. No cuando llevaba más de 8
horas buscando la JellyFish, una de las pequeñas compañías de música de la que
había, por fin, ingresado como trainee gracias a una audición callejera. Sin
comer ni beber desde las 10 de la mañana y con un plano de Seúl, la gente me
había llevado de un lado al otro con direcciones equivocadas. Ahora, por fin,
parecía estar yendo por el camino correcto.
Me detuve un instante para recuperar
el aliento y limpiarme el sudor que perlaba mi frente y saqué la carta de
presentación que me habían dado para entregársela a la primera persona que
encontrara en la compañía. No estaba segura de cuanto quedaba para llegar, pero
sería mejor tenerla a mano. Di gracias de no haber traído la pesada mochila, y
solo un bolso, porque pese a no llevar demasiado encima, me pesaba como un
muerto.
Una última cuesta me dejó sin aliento
y con el corazón acelerado, sin embargo vislumbré una casa blanca con varios
coches. En mi foro interno recé para que aquello no fuera lo que pensaba que
era. Pero una vez más, di en el clavo. La imagen de la Jellyfish adornaba una
de las columnas de la casa, y la marca de VIXX se encontraba pegada a un coche…
muy cutre.
Escuché entonces, el sonido de un
grifo abierto y el agua estrellándose contra algo. Jadeando, giré la cabeza
para encontrarme un par de ojos oscuros y rasgados observándome con seriedad y
sorpresa mezclada. Los labios del chico se entreabrieron como para decir algo
pero se cerraron, mientras su mirada me examinaba. Lo conocía. El chico que
estaba limpiando el coche de ventanas tintadas era Leo, vocalista e integrante
de VIXX.
Casi sin poder respirar, me acerqué a
él. Leo al principio no se movió, atento a mis intenciones, pero luego
retrocedió un pie y disimuladamente miró la puerta. No lo juzgué por ello. Era
normal.
-Soy… -mi voz estaba áspera y al
tragar saliva hice una mueca de dolor-. Soy… trainee… -eso lo detuvo, pero
siguió sin decir nada-. Me llamo Park Hana. La carta… la
carta es de… mírala… -se la di, y pese que al principio parecía receloso, apagó
la manguera y con sumo cuidado recogió mi carta, abriéndola y leyendo
detenidamente el escrito.
Me sentía mareada, sedienta y
famélica. Mientras Leo se entretenía observé el lugar, algo decepcionada. Me
esperaba algo más grande, como la SM o la JYP. ¿Pero qué se puede esperar de
una pequeña compañía? La Jellyfish estaba rodeada de árboles que dificultaban
su búsqueda a extraños. Sonreí sin ganas. Estaba a punto de ponerme a llorar,
horas atrás. Temía no llegar a tiempo o llegar atrasada. Y así había sido, pero
no era culpa mía, sino de las direcciones equivocadas que el jefe de la
audición me había dado.
Me froté los ojos, cansada de tanto
caminar. Un golpe de aire repentino me empujó y respiré profundamente el
frescor. Estaba demasiado mareada para nada más. Un movimiento por parte de la
persona delante de mí me sacó de mi ensoñación y parpadeé observándolo meter el
escrito en el sobre.
-Sígueme –musitó, escuchando por
primera vez su voz. Se dio la vuelta y en el momento en que di un paso adelante
todo se me vino encima. Caí de rodillas contra el suelo, la cabeza latiéndome
fuertemente. Leo se dio cuenta de que no estaba detrás de él y se alarmó,
inclinándose hacia mí.
-¿Estás bien? –preguntó, pero lo
sentí como algo lejano. Asentí, pero estaba mintiendo.
-Creo que debería haber comido… en el
McDonalds –dije con un hilo de voz, y me desmayé.
***
En las profundidades del sueño,
escuché un conjunto de voces. Ambos géneros, más hombres que mujeres
parloteaban sin cesar. No me ubicaba, creía estar aun en mi casa, y me sentí
molesta por el ruido.
-¿Qué dijo, Leo? De donde venía?
–inquirió alguien.
-“Creo que debería haber comido en el
McDonalds” –contestó una voz monótona-. Luego se desmayó.
-¿Y ya está? ¿Nada más? –se sumó otra
persona. Hubo un silencio y se escuchó un intercambio de papeles, un sobre
abierto y una hoja desplegada-. Ah… Park Hana… El manager Kim habrá vuelto a
hacer una audición. Es el único manager sin trainees. Deberíamos avisarlo para
decir que ella está aquí.
-N, ¿tu sabías que iba a venir? –una
voz diferente irrumpió en el lugar.
-No, ni idea. Lo que pasa es que
nuestro manager me comentó lo del manager Kim. No le di demasiada importancia,
igualmente. No es la primera vez. SoRa, toma la carta y ve a dársela, por
favor.
-De acuerdo –la chica, SoRa, se alejó
con pasos rápidos.
-Eh, Ken. No te acerques tanto a Hana –advirtió N.
-Es que… le noto algo diferente… Es
como si no fuera del todo… no sé… –la voz de Ken me sorprendió al estar tan
cerca y que me di cuenta de que no estaba soñando. Abrí los ojos y me incorporé
bruscamente, chocando de forma dolorosa con alguien. Ambos proferimos un
quejido lastimero.
-¡Mi nariz! ¡¡Mi nariz!! –chillaba
Ken, el tono de voz subido unos cuantos decibelios.
-¡Mi frente…! –gemí yo,
agarrándomela-. Auu…
-Déjame ver –ordenó N apartándome las
manos. Fue entonces cuando realmente abrí los ojos. Y deseé no haberlo hecho,
pues él estaba demasiado cerca. Cuando observó mis orbes grandes y almendrados,
su primera reacción fue tirarse hacia atrás. No de forma violenta, pero si
notoria. Una vez rehecho de la primera impresión se acercó otra vez, evitando
mirarme en todo momento.
-No tienes nada. No ha pasado nada,
un poco rojo pero… -se levantó y se giró- nada.
-Hyung –habló Hyuk entonces-. Por qué
antes te has… -pero se quedó callado observándome el rostro-. Ah… -fue lo único
que dijo. Pero no me entretuve demasiado a pensar por qué se comportaban así.
Giré mi rostro hacia Ken, quien en ese momento llevaba un pañuelo en la nariz y
la cabeza echada hacia atrás.
-Esto… -susurré, avergonzada por
haberle causado algún mal-. Siento lo ocurrido… yo no… perdona…
Él bajo la cabeza.
-No es nada, pero ten más… -se quedó
en silencio-. ¡Ay madre! ¿Qué eres?
La pregunta repentina me provocó
sentimientos negativos. ¿Tan desagradable era? Debieron notar la aflicción en
mi cara, pues muchas manos le chocaron los cinco a la boca de Ken.
Ravi sacudió la cabeza, llamándome la
atención.
-No malinterpretes sus palabras, él…
-¿Tan… fea soy? –suspiré.
-¿Que…? ¡No, NO!¡Ken lo decía por tus ojos!
-¿Llevas lentillas? –preguntó
HongBin. Negué con la cabeza-. ¿Por qué son azules entonces…?
-Mi madre era australiana… Y albina
–informé-. Mi cabello es blanco, pero me lo teñí. Lo único que no puedo
esconder son los ojos.
Todos los presentes soltaron un
“aaaaaaaaah……” de comprensión.
-Eres mitad y mitad –concluyó el
visual. Asentí. Ken me tocó el hombro con un dedo, levemente.
-Siento haberte ofendido –se sinceró.
Agité la cabeza.
-Nada de eso, no pasa nada –sonreí. Y
entonces me percaté. ¡Estaba ante uno de mis grupos favoritos de música y ni
siquiera me había dado cuenta! No me dio tiempo a ponerme nerviosa, por que un
hombre penetró en la estancia y aplaudió sonoramente.
-¡Bravo! –rió-. ¡Has encontrado la
compañía!
Esa alegría despreocupada me molestó
bastante.
-¿Qué le costaba darme un plano o una
dirección? ¡¿Usted sabe lo que me ha costado encontrarla…?!
-Lo sé, pequeña gritona –me cortó-,
utiliza esa potencia de voz para mejorar en canto. Lo importante es que estás
aquí. Mañana por la mañana enviaremos un coche a buscar tus cosas. Es
recomendable que vayas con ellos para saber… que llevarse y qué no.
Me resigné y asentí.
-¿Y mientras, donde voy a dormir,
manager Kim? –pregunté. Él se tamborileó el mentón con los dedos.
-Hay una habitación libre arriba. Te
tendremos que habilitar un piso como a todos los trainees, cerca de aquí. En
general, todas comparten pero… tú eres la impar. Por lo tanto… Mientras te
quedas por aquí… te sugiero que te familiarices con la compañía a fondo.
Empezarás a entrenarte pasado mañana.
Whaa me a gustado mucho este capitulo !!
ResponderEliminarY las partes que mas me han gustado a sido el golpe con Ken y lo de Tan fea soy xD yo estava pensando que pasava con su apariencia ya que no entendia nada xD
ya tengo ganas del siguente Capitulo!!
Por cierto soy Lidya xD es que no e podido evitar leerlo ahora jaja
Hahaha Hola Lidia!!! Bueno, tienes colgados los otros dos capítulos ya haha >w< Y gracias por pasarte y dejarme un comentario, lo agradezco muchisimo!
EliminarJAJAJAJAJAJAJJAA KEN! "Que eres!?" Jajajaja me he reido mucho xD.
ResponderEliminarJope me voy a enganchar a otra y no quiero ;---; pero me leeré otra y seguiré más tarde xd.
Como... al ser su madre medio albina... ella tambien tiene genes albinos pero no del todo? O es rubia y tiene el.pelo blanco porque es medio australiana?
Tiene pelo de un rubio casi blanco haha. Seguramente si tuviera ella hijos, los hijos serían albinos xD Es decir, es así por que la madre es australiana albina. xDDD
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